Para nuestras conservas esterilizaremos nuestros botes dos veces.
La primera en vacio, de esa forma ayudamos a la limpieza.
Sumergir los botes y tapas en agua, con un paño de algodón en el fondo para evitar que con los golpes del agua hirviendo los rompan contra el fondo.
La segunda esterilización
Verter el ingrediente hasta el borde del bote y cerrarlo fuertemente.
Volvemos a cocer durante unos 20 minutos al baño maría.
Dejamos enfriar. Así conseguimos que disminuya por efecto térmico el contenido y se cree un vacio en el interior.